sábado, 5 de diciembre de 2009

Síndrome Seco (SS) y Síndrome de Fatiga Crónica (SFC)

El Síndrome de Fatiga Crónica (SFC) es un proceso multisistémico definido por los criterios diagnósticos internacionales del Centro de Enfermedades de Atlanta (CDC) o de Fukuda, como un proceso de reciente descripción caracterizado por una fatiga invalidante de más de 6 meses de evolución, intolerancia al ejercicio físico, sueño no reparador y alteraciones en la concentración y memoria.

En su fisiopatología se considera que sobre una base de predisposición genética, actuaría un agente desencadenante (virus, bacterias intracelulares, exposición a tóxicos, estrés físico y/o psíquico mantenido, entre otros), que desencadenaría una respuesta inmune anómala en la que estarían implicadas la vía de la ribonucleasa y la 2-5 sintetasa.
Como consecuencia de este desarreglo inmune crónico, constatamos multitud de procesos de base inmunológica tales como el fenómeno de Raynaud, artralgias, aftas bucales, endometriosis, hipersensibilidad a metales, hipersensibilidad a fármacos, procesos de atopía tales como asma bronquial y urticaria. Dentro de estos fenómenos inmunes destaca la existencia del síndrome seco (SS), dentro de los diversos cuadros comórbidos que suelen acompañar el SFC, tales como la fibromialgia, el síndrome miofacial, tendinopatías y la disfunción neurovegetativa.

El SS, vendrá definido por la presencia de xerostomia (sequedad de boca) y xeroftalmia (sequedad ocular), que clínicamente será referido como escozor ocular, sensación de arenilla ocular y conjuntivitis de repetición. Así mismo dicho SS, también ocasionará sequedad faríngea y traqueal, siendo uno de los elementos implicados en la presencia de tos crónica que refieren estos pacientes y sequedad vaginal, que condicionará una disminución de la lubricidad vaginal y será otro elemento que distorsionará gravemente la relación sexual en estas pacientes, junto con la disminución de la libido, la intolerancia al ejercicio físico y la hipersensibilidad al tacto.

Hemos de mencionar diversos aspectos al considerar el SS, en primer lugar que un importante número de fármacos que pueden tomar estos pacientes pueden ocasionarlo y que se debe diferenciar de una entidad inmunológica denominada Síndrome de Sjögren que tiene unos criterios propios. Y así se debe diferenciar el Síndrome de Sjögren que puede condicionar una cuadro de fatiga crónica, como cualquier proceso de base autoinmune y el SFC con síndrome seco acompañante como elemento comórbido.
En el tratamiento del SS, se debe informar en primer lugar que se trata de un proceso no grave, aunque sí que puede ocasionar diversas molestias de variada índole. En primer lugar para el tratamiento de la xerostomia es importante la correcta hidratación y aunque existe saliva artificial disponible en farmacias, no es bien tolerada y es importante el control periódico y minucioso por el odontólogo para evitar las complicaciones infecciosas. Para la xeroftalmia es importante la aplicación diaria de lágrimas artificiales y evitar la aparición de complicaciones infecciosas tales como blefaritis y conjuntivitis.
Es importante tener en cuenta que debido a la hiposecreción vaginal, si no se utilizan cremas, el acto sexual puede resultar doloroso.
Dr. José Alegre MartínCoordinador Unidad SFC Hospital Vall d'Hebron de Barcelona.Colaborador Unidad SFC Centro Médico Delfos de Barcelona.Miembro del grupo asesor del SFC en el Ministerio de Sanidad y el Departamento de Salud de la Generalitat de Catalunya.


Existen múltiples causas para esta enfermedad:

-Edad: el ojo seco es más frecuente en personas mayores ya que la producción de lágrimas decrece con el tiempo.
-Sexo: las mujeres son más propensas a tener ojo seco, debido, entre otras causas, a factores hormonales (ej: menopausia).
-Medicamentos: una gran cantidad de medicamentos utilizados en la actualidad disminuyen la producción de lágrimas: tranquilizantes, antidepresivos, somníferos, anticonceptivos, diuréticos, algunos anestésicos, descongestivos, antihistamínicos, algunos antiglaucomatosos, anticolinérgicos, hipocolesterolémicos.
-Enfermedades sistémicas: Síndrome de Sjögren, Artritis reumatoidea, trastornos tiroideos, diabetes, cirrosis biliar primaria, anorexia, bulimia, alergias, etc.
-Factores ambientales: Ambientes climatizados (aire acondicionado o calefacción) en los cuales el aire es muy seco y se renueva escasamente, lugares con mucho viento, polvo, polución, humo, etc.
-Factores laborales: Actividades que requieran el uso de computadoras por muchas horas (al mirar la pantalla disminuye la frecuencia del parpadeo y eso hace que los ojos se sequen más) o lectura prolongada (por el mismo fenómeno).
-Uso de lentes de contacto: las lentes o los líquidos pueden producir o empeorar el ojo seco.

¿Qué síntomas produce el ojo seco?
Los síntomas característicos que produce el ojo seco son sensación de cuerpo extraño, ardor, picazón, dolor ocular, fluctuaciones en la visión, fotofobia (sensibilidad a la luz), visión de halos de colores en las luces, sensación de pesadez de los párpados, etc. Estos síntomas empeoran en ambientes climatizados (el aire acondicionado y la calefacción secan mucho el ambiente), lugares muy secos o con viento o humo.

Normalmente las lágrimas se producen en la glándula lagrimal, ubicada en el ángulo superoexterno de la órbita, (Fig 1) y en glándulas accesorias que están ubicadas en el borde de los párpados. El parpadeo permite repartir la lágrima sobre la superficie del ojo, y a la vez ejerce un mecanismo de bombeo de las mismas hacia la vía lagrimal, que constituye el drenaje o "cañería" del ojo. Parte de la lágrima se evapora y parte se drena por esta cañería constituída por la vía lagrimal. (Fig. 2).











¿Cómo se hace el diagnóstico de ojo seco?
En el Síndrome de Sjögren, la glándula lagrimal se altera ya que se produce una infiltración linfocitaria de la misma (igual que la que se produce en las glándulas salivales) por lo que produce menor cantidad de lágrimas.

Es el oftalmólogo el que debe realizar este diagnóstico, en base a distintos tests clínicos que se realizan en el consultorio, que pueden complementarse con exámenes específicos de laboratorio.
Los tests que se utilizan normalmente son los siguientes:
-Test de Schirmer: Consiste en colocar una pequeña tira de papel secante en el borde del párpado inferior de cada ojo, durante 5 minutos, para medir la cantidad de lágrimas que tiene el paciente. Este test no duele, aunque puede generar cierta molestia pasajera. (Fig 3).
-Break up time (BUT): Consiste en colocar una gota de un colorante (fluoresceína) y ver cuánto tiempo tarda en romperse la homogeneidad de la película lagrimal sin que el paciente parpadee.
-Rosa de Bengala o lisamina verde: Estos dos colirios tienen la particularidad de teñir la superficie del ojo que se encuentra dañada por la sequedad ocular (células muertas o alteradas).
Todos estos tests han sido realizados durante muchos años y son inocuos, aunque el día en que se realizan el paciente puede sentir algunas molestias.

Existen además otros estudios que pueden ser de utilidad, como ser la citología de impresión y los estudios bioquímicos de las lágrimas para medir sus distintos compontentes.

El diagnóstico de ojo seco NO significa diagnóstico de Síndrome de Sjögren, ya que como se ha mencionado anteriormente son múltiples las causas de sequedad ocular.


¿Cuál es el tratamiento del ojo seco?
El tratamiento de la sequedad ocular varía de acuerdo a la severidad del caso. El principal tratamiento consiste en la utilización de lágrimas artificiales, ya sea en forma de gotas, geles o ungüentos. No existen reglas generales en cuanto al tratamiento, cada paciente debe ser evaluado y medicado. Existen en el mercado múltiples tipos de gotas y geles, y en muchos casos un paciente responde mejor que otro a una determinada medicación. En general se observa mejor respuesta a largo plazo con gotas de lágrimas sin conservantes.
Es conveniente que las lágrimas sean utilizadas durante todo el día aunque el paciente no sienta el ojo seco. Si sólo realiza el tratamiento cuando el ojo duele se pueden producir lesiones en la córnea, y lo ideal en pacienes con ojo seco crónico es prevenir esta situación.

Existen otros tratamientos, como ser la ciclosporina en gotas, que en muchos pacientes está dando muy buenos resultados; o también el suero autólogo, que consiste en sacar sangre al paciente y luego procesarla para obtener el suero para colocarlo en el ojo en forma de gotas. En ocasiones se pueden usar corticoides tópicos para episodios agudos de sequedad.

También se recomienda a los pacientes consumir una buena cantidad de líquidos, y una dieta rica en ácidos grasos esenciales (omega 3) ya que estudios recientes han demostrado que mejora los síntomas y signos de ojo seco.

Otras opciones de tratamiento son la cevimelina y la pilocarpina (comprimidos) ambos utilizados para el tratamiento de la boca seca. Se ha observado que no sólo mejora la sequedad bucal sino la de los ojos, aunque no todos los pacientes toleran estas medicaciones

Cuando a pesar de la medicación el paciente no mejora, existe la posibilidad de ocluirle los puntos lagrimales, ya sea en forma temporaria con dispositivos de silicón (punctum plugs) (Fig 4) o en forma definitiva cauterizando o realizando una pequeña intervención quirúrgica para tapar los puntos lagrimales. La función que cumple este tratamiento es la de hacer que la lágrima permanezca más tiempo en el ojo (es comparable a la colocación de un tapón en una bañadera).

Otro factor que es fundamental en el tratamiento es la protección ocular. Es recomendable que los pacientes utilicen anteojos de protección para protegerse del sol, viento, polvo, etc. y para evitar así el aumento de la evaporación de la lágrima. También es importante evitar los ambientes climatizados: el aire acondicionado y la calefacción secan mucho el ambiente, por lo que es mejor evitarlos o humidificar el ambiente con pequeños recipientes con agua o vaporizadores.
Cuando se realicen actividades prolongadas de lectura o uso de ordenadores, es conveniente hacer descansos periódicos y además aumentar la frecuencia del parpadeo. Se ha comprobado que durante el desarrollo de las mismas, la frecuencia del parpadeo tiende a disminuir, con lo cual los ojos se secan más aún.

En los últimos tiempos ha habido extensa propaganda sobre una cirugía que consiste en transplantar glándulas salivales accesorias (las que están en el labio) a los fondos de saco de la conjuntiva con la suposición de que estas glándulas mejorarán la lubricación del ojo.

Todavía no existen reportes que indiquen que esto realmente funciona, y menos en pacientes que tienen Síndrome de Sjögren, ya que las glándulas salivales de estos pacientes se encuentran tan afectadas como las glándulas lagrimales.

Por lo tanto, si Ud. tiene síntomas de ojo seco, sería conveniente que sea controlado y tratado por un oftalmólogo. Si este síntoma se asocia con sequedad de boca y dolores articulares, es posible que Ud. tenga Síndrome de Sjögren.





BIBLIOGRAFIA
-Aragona P, Di Pietro R, Spinella R, Mobrici


M. Conjunctival epithelium improvement after systemic pilocarpine in patients with Sjogren's syndrome.Br J Ophthalmol. 2006 Feb;90(2):166-70. PMID: 16424527 [PubMed - indexed for MEDLINE].



-Vriezekolk JE, Geenen R, Hartkamp A, Godaert GL, Bootsma H, Kruize AA, Bijlsma JW, Derksen RH.


Psychological and somatic predictors of perceived and measured ocular dryness of patients with primary Sjogren's syndrome.J Rheumatol. 2005 Dec;32(12):2351-5. PMID: 16331762 [PubMed - indexed for MEDLINE].



jueves, 3 de diciembre de 2009

TÓXICOS. ¡Pregunta al fabricante!






Hoy en día hay pruebas científicas de que muchas sustancias químicas presentes en bastantes artículos de uso cotidiano tienen efectos perjudiciales sobre la salud. Pueden estar ocultas en alimentos, juguetes, biberones, utensilios de cocina, cosméticos, ordenadores, plásticos, etc. Los efectos sobre la salud dependen de la sustancia de que se trate y no suelen ser inmediatos. A veces son fruto de una exposición reiterada, de su acumulación en nuestro organismo,... Pueden ser alergias, cáncer, daños neurológicos, infertilidad, problemas en el desarrollo del feto o modificaciones del ADN.


El consumidor lo tiene dificil para saber si un producto tiene sustancias potencialmente peligrosas: normalmente no figuran en la etiqueta o, si aparecen, no resulta sencillo identificarlas. Esto no debe inducir a la pasividad, al contrario. Tenemos derecho a averiguarlo para proteger nuestra salud y la de los nuestros.


Un nuevo reglamento europeo, conocido por sus siglas REACH, obliga a las empresas a responder antes de 45 días a las consultas que reciban sobre la presencia de sustancias tóxicas en sus productos.



Las más preocupantes es de esperar que con el tiempo sean sustituidas.


La lista de estas sustancias se puede encontrar en inglés en http://www.sinlist.org/


Aquí teneis un modelo de carta, que ofrece la OCU, que os servirá para preguntar a los fabricantes



Carta Modelo


Añada aquí sus datos de contacto:



Fecha
Estimado/a Sr./Sra.,
Tal como se estipula en el nuevo reglamento europeo de
sustancias químicas, REACH, me gustaría que me informase
sobre la presencia de cualquier sustancia química de la “Lista de
sustancias químicas altamente preocupantes” en el producto_
____________________o en su envase.
Si alguna de estas sustancias químicas perjudiciales estuviera
presente, en el reglamento se estipula que, en un plazo máximo
de 45 días, debe facilitarme su nombre y la información suficiente
que permita utilizar el producto de una manera segura.
Asimismo, le agradecería que me informase acerca de otras
sustancias químicas perjudiciales que pueda contener este
producto, así como de las medidas adoptadas por su empresa
para ofrecer este producto u otro similar en el que estén ausentes
estas sustancias. Si desea identificar con detalle las sustancias
químicas perjudiciales puede consultar la Lista S.I.N. 1.0 de
REACH (www.sinlist.org) y la Lista de prioridades de los sindicatos
europeos (www.etuc.org/r/830). Para obtener más información
acerca de sus obligaciones según REACH, localice el portal de

información nacional en:
http://echa.europa.eu/reach/helpdesk/nationalhelp_contact_en.asp


Atentamente,








cc:
1. European Chemicals Agency, P.O. Box 400, 00121 Helsinki,
FINLANDIA
2. OCU, Organización de Consumidores y Usuarios, C/ Albarracín,
21, 28037 Madrid, ESPAÑA